El camino que hemos recorrido junto a Don Selso Contreras no culmina con un punto final, sino con una pausa reflexiva en el presente. La ausencia de un adiós físico inevitable no es una omisión; es la prueba viva de que el amor incondicional no solo consuela, sino que sostiene la existencia misma.
Don Selso sigue aquí. Su vida, con el cuerpo de carbonero forjado en el sacrificio y la mente envuelta en las brumas del olvido, es una declaración de amor incondicional que se vive día a día.
"Catalina, la niña que una vez fue protegida, es ahora quien se arrodilla ante el cielo. Su ruego más íntimo es: 'Que Dios me dé vida y salud para cuidar a mi padre y cumplir bien mi tarea', su eterno superhéroe."
Esta fotografía no es solo una imagen. Es el testimonio de que esta historia no es pasado, sino presente vibrante. Don Selso respira, existe, y cada día es cuidado con la misma devoción que él dio durante toda su vida.
Pero el legado de Don Selso no se quedó en las cuatro paredes de su hogar. Su hija, la misma niña regalona por la que él había vendido su mediagua y por la que había sacrificado su descanso, tomó la dolorosa realidad y la transformó en una misión de luz. Hace más de tres años, ella tuvo el coraje de abrir las puertas de su intimidad a las redes sociales, compartiendo día a día la vivencia del Alzheimer con una honestidad brutal y una ternura infinita.
Este acto de valentía generó una respuesta que trascendió la pantalla. Su vivencia se convirtió en un bálsamo sanador para miles de seguidores, un espejo para innumerables familias que, en el silencio de sus casas, libraban la misma batalla. La voz de Catalina se convirtió en un faro de apoyo emocional, demostrando que la vulnerabilidad compartida es la mayor fuente de fortaleza colectiva. Ella es la arquitecta de la comunidad que entendió que la enfermedad se cuida con amor y que el olvido no se combate solo, sino en compañía.
El amor trasciende fronteras: Don Selso rodeado de su familia y miembros de la comunidad que viajaron desde Estados Unidos para honrar su legado
Miles de corazones unidos por una historia de dignidad. Personas que cruzaron continentes para estar junto a un hombre que les enseñó, sin saberlo, el verdadero significado del amor incondicional.
Este libro es, por lo tanto, la crónica definitiva de ese fenómeno. No es solo la biografía de un hombre; es el testamento escrito de una comunidad que se formó en torno al respeto, la dignidad y la perseverancia del corazón. El Legado de Don Selso es la confirmación palpable de que la historia personal, cuando se cuenta con verdad, se convierte en un tesoro para las almas que resuena globalmente.
El amor incondicional es el ancla. Es la prueba de que, incluso en el laberinto desorientador del olvido, la dignidad humana siempre puede ser rescatada y honrada. Don Selso no solo está siendo amado por su familia; está siendo celebrado y honrado por miles de personas.
Su vida, y la decisión de su hija de compartirla, es la demostración fehaciente de que el amor es el motor viral de la esperanza.
La memoria del corazón siempre triunfa.
El amor incondicional trasciende el olvido.
Este libro es el tesoro de una comunidad de almas.
Mientras estas palabras sean leídas, mientras Don Selso Contreras viva rodeado del amor de su familia y el respeto de una comunidad global, su legado permanecerá inmortal. No en monumentos de piedra, sino en algo mucho más poderoso: en los corazones de todos aquellos que aprendieron de él que la verdadera riqueza no está en lo que acumulamos, sino en lo que entregamos.
Este no es un final. Es una continuación eterna del amor que trasciende el tiempo, el olvido y todas las barreras imaginables.
Don Selso Contreras nos enseñó a vivir con dignidad absoluta, amor incondicional y esperanza inquebrantable. Su historia no termina aquí; vive en cada persona que la lee, en cada familia que encuentra consuelo en sus páginas, en cada corazón que comprende que el amor verdadero nunca muere.
Con infinito amor y respeto
Para Don Selso Contreras
Para su familia que lo cuida con devoción infinita
Para cada persona que enfrenta el desafío del Alzheimer
Para la comunidad global que encontró en esta historia
la prueba de que el amor incondicional es eterno